Sesiones de video en vivo, un festival, línea de ropa, la reedición de 40 títulos y realmente trabajar como colectivo, es lo que prepara Descabellado Discos del Perú para celebrar sus 12 años.
Una cosa es el trabajo colectivo, otra el llamarse un colectivo llevando un nombre propio y otra cosa es realmente serlo.
Cuando el colectivo Descabellado fundó el sello, en principio eligió no agregar a su nombre el usual «records» si no «discos del Perú», si bien se suele referir al sello de las dos maneras. Su centro de operaciones es el estudio de grabación conducido por Rafael Otero (recientemente incorporado como profesor de producción musical en una de las nuevas escuelas de música en Lima)
Cuchillazo, Suda, El Hombre Misterioso y Sabor y Control, fueron un núcleo inicial, del cual se desprendieron La Mente, otras bandas como La Prensa y proyectos intermitentes con integrantes de distintas bandas como La Máquina y The Pastelers . Actualmente se han sumado nuevas generaciones que han grabado en el estudio y guardan afinidad con las propuestas iniciales, como Olaya Sound System y Los Filipz. Y para esta celebración de aniversario se suman a ellos King Cholo Sound System, el fotógrafo Alejandro Olazo y el artista plástico Giuseppe de Bernardi
Vistos desde afuera a lo largo de los años, se puede apreciar como el colectivo Descabellado ha crecido y vivido siendo producto de su contexto, experimentando y reaccionando ante él. Las escenas musicales alternas en el Perú buscan profesionalizar su autogestión, haciendo que las cosas funcionen mejor y que sean rentables.
Un detalle está también en que el colectivo desde otras perspectivas, puede confundirse en la delgada línea entre trabajo colectivo y argolla endogámica (es decir exclusión de los demás y exclusividad a los amigos cercanos) Pero esto no es tan cierto ¿por qué? porque me consta que sus bandas han ido siempre a donde las convocaran, a costo mínimo o hasta gratuito, apoyando diversas causas y organizaciones y si no podía ir una, te daban otra alternativa. (Aquí El Hombre Misterioso en el acto contra George W Bush cuando estuvo en Lima)
Pero la principal prueba de que Descabellado no es una argolla, es porque es ahora, cuando la escena está cambiando y creciendo, que ellos mismos miran a su alrededor y ven que si bien han tenido el sello y el estudio como una base de operaciones para cada banda ir por su lado, otra cosa es crear cadenas de producción distribución y consumo como sello. Es decir, esas otras labores que implican el hacer música, más allá de tocar.
Le enviamos un cuestionario conjunto, aquí Nicolás Duarte resume las respuestas de las diversas bandas a nuestras preguntas.
Y para acompañar eso les dejamos con La Máquina, una de las bandas paralelas formada por integrantes de las diversas bandas del colectivo.
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¿Cuáles son los planes de celebración de los 12 años del sello?
Hemos estructurado una campaña para todo el año que incluye la reedición de nuestros discos (más de 40 títulos), la producción de las Sesiones Descabelladas, el lanzamiento de una línea de ropa y merchandising, el montaje de exposiciones fotográficas y la producción del primer Festival Descabellado.
El lema de esta campaña refleja la importancia que tiene para nosotros el hacer música independiente y celebra la pasión que sentimos por ella: «Primero la música, después todo lo demás».
La primera novedad que estamos lanzando son las Sesiones Descabelladas. Más de 21 temas grabados y filmados en vivo en el Estudio Descabellado por las 8 bandas que actualmente conforman el colectivo.
Además tenemos programados para este año la edición de nuevo material de nuestras bandas, así como el fichaje de nuevas bandas y nuevos artistas.
¿Cómo ha cambiado el contexto para la chamba musical desde sus inicios hasta ahora?
Ha cambiado muchísimo. Y sentimos que en gran parte ha sido por el trabajo de todas las bandas, artistas y profesionales de la música independiente que jamás claudicamos. Recordamos nuestros inicios con mucho orgullo pero reconocemos que era una época bastante incierta. Sin caminos trazados. Sin herramientas. Sin mucha conexión o articulación entre nosotros. Fuimos descubriendo mientras dábamos nuestros primeros pasos que nada estaba hecho y que lo que existía no era para nosotros. Había que aprender a crear nuestro propio espacio con nuestras propias reglas.
Otros dos grandes responsables de este cambio han sido la tecnología y el uso que le hemos dado a ésta en nuestras comunicaciones. Nosotros veníamos de otra escuela, la del trabajo silencioso, del viaje solitario. Y de repente vimos nacer todo un nuevo orden de interconexión e interlocución inmediata que hoy nadie cuestiona o siquiera asume como algo nuevo. Esta nueva era se ha instalado en tiempo record y ya es tan parte de nosotros que pocos podemos imaginar cómo sería nuestro trabajo sin ella. Tal vez una de las cosas que más nos ha educado es el haber vivido en esa otra época. Quizá por eso vemos las falencias y necesidades que aún nos rodean como oportunidades. Sabemos que nada es imposible.
El factor económico también ha dado un giro de 180 grados. La nuestra era una época austera, la época oscura del negocio de la música. Las grandes disqueras y sellos cerraban, o por lo menos se largaban de países no rentables como el nuestro. Nadie pensaba en la música como un negocio posible y mucho menos rentable. Sin embargo, lejos de los pronósticos de hace unos 10 años, los discos se siguen vendiendo, cada vez hay más y mejores conciertos y eventos musicales de todo tipo, la producción nacional es alucinantemente buena y constante, y la calidad de nuestros productos finales es del primer nivel. Todo esto está cambiando la percepción de los que hace unos años jamás hubieran apostado por la música nacional, llámese marcas, gobiernos o canales de comunicación masiva.
¿El sello está trabajando como colectivo? ¿Cómo se está dando esto? ¿Qué bandas están participando?
Aunque en un principio nos constituimos como un sello discográfico independiente, con el transcurso del tiempo nuestras necesidades, talentos y posibilidades han ido trascendiendo esta definición. Hoy somos mucho más que un grupo de bandas de música.
Nos consideramos un colectivo de músicos y artistas de diversas expresiones (ligados de una manera fundamental a la música) Actualmente estamos conformados por ocho bandas musicales de diversos estilos: El Hombre Misterioso, Cuchillazo, La Prensa, Suda, Los Olaya, La Mente, Los Filipz y Sabor y Control; y recientemente se han adherido a nuestras filas el DJ King Cholo Sound System, el artista plástico Giuseppe de Bernardi y el fotógrafo Alejandro Olazo.
¿Qué nuevos elementos de creación o promoción están usando en este relanzamiento?
Ahora entendemos nuestro trabajo de manera más integral. La música sigue siendo el eje principal de nuestra creación pero sus complementos han ido tomando cada vez más fuerza e importancia.
La mayoría de nosotros tuvo la necesidad de desarrollarse profesionalmente en campos paralelos a la música. Además de músicos tuvimos que convertirnos en fotógrafos, editores, ingenieros, productores, comunicadores, publicistas, diseñadores, periodistas. Ahora estamos usando todas las herramientas que nos daban de comer por otro lado para alimentar nuestra música.
¿Qué creen que es lo más interesante que ha hecho el sello en estos 12 años…?
Por un lado tenemos una producción discográfica bastante contundente, son 40 discos en 12 años… y contando. Y muchas de nuestras bandas son referentes importantes en la escena nacional.
Sin embargo creemos que lo principal es haber logrado definir un nuevo concepto de éxito profesional a nivel de colectivo. Para nosotros la meta era crecer, aprender y mejorar mantenido siempre el respeto máximo por la música. Ese es un principio que sentimos nos identifica y nos ha dado un lugar en la escena que valoramos bastante. Nuestra meta era (y es) hacer mejor música, tocar mejor nuestros instrumentos, expresarnos de manera más completa y sobre todo disfrutar al máximo de lo que hacemos.
Nunca nos quitó el sueño lo demás. Ser consecuentes con eso es lo más importante que hemos hecho.
¿…y que creen que podrían haber hecho mejor?
Pudimos haber empezado a articularnos de manera más profunda y organizada desde antes. Eso es algo que nos pesa, pero al mismo tiempo sentimos que el que cada banda haya hecho su propio camino hoy nos alimenta y nos fortalece.
Pudimos también haber administrado y aprovechado mejor oportunidades que se nos presentaron como colectivo, pero eso requería de una madurez incompatible con la edad del colectivo en esos momentos.