Foto por Kamilo Riveros
Conversamos con una de las bandas nuevas más activas de los últimos tiempos, que se presentará gratis este viernes 24 en CFT junto a El Hombre Misterioso.
Enmarcados dentro de la tradición de síntesis musical en el Perú, que se inicia con El Polen y tiene antecedentes con Los Incas Modernos, La Nueva Invasión sorprendió a propios y extraños por la velocidad en la que han logrado afirmarse como una exitosa propuesta festiva que cuenta historias de la vida en la ciudad.
Conversamos con ellos acerca de su trayectoria, su nuevo disco y las tradiciones musicales en las que se enmarcan, como parte de la antesala a su presentación junto al Hombre Misterioso en Centro Fundación Telefónica este Viernes 24 de Febrero a las 7:00 pm en la Av Arequipa 1155, ingreso libre.
Siendo una de las bandas nuevas más constantes ¿Cómo recapitularían la trayectoria que ha tenido La Nueva Invasión?
Nuestro primer año como banda ha sido bastante productivo, se pudo concretar el disco, la gira al interior del país y Bolivia, muchos conciertos en los que pudimos alternar con bandas de la escena local e internacional.
Estamos muy agradecidos con las oportunidades que se nos presentaron de tocar para públicos diversos (Plaza San Martín, Plaza de Armas, Feria de Libro, locales rockeros, discotecas, eventos culturales, universidades y hasta en campeonatos de fulbito) Y eso ha sido en parte porque nosotros lo hemos buscado pero también, porque hay mucha gente: amigos, artistas, gente que milita en diferentes colectivos culturales que han tenido harta fe en nosotros y nos han dado esa oportunidad. Ha sido un año intenso que deja de saldo un proceso de aprendizaje muy rico.
¿Cuál ha sido el proceso de composición y producción del primer disco de la banda?
El proceso de composición ha tenido dos partes: una antes de debutar en escenarios que fue de más o menos año y medio solo ensayando y sacando temas. Y la otra de cuando salimos a la cancha con solo 4 o 5 temas en el repertorio, luego empezaron a salir los conciertos y tuvimos que producir temas nuevos al toque.
La parte de producción del disco ha sido básicamente gracias a los eventos y a la nueva conciencia del público que cree en apoyar a su escena y en nuestro caso asistió masivamente a los 3 conciertos organizados por la banda. En ese sentido podemos decir que el disco ha sido completamente autogestionado, sin promotores ni productores de por medio.
El disco lo grabamos en 6 meses en un estudio donde solíamos ensayar (El Arca) Y la producción física del disco junto con la mezcla y masterizada se hizo en 10 días con la fecha de presentación del disco encima. Si no nos poníamos fecha límite probablemente aún seguiríamos grabándolo.
Tenemos entendido que la primera remesa se agotó rápidamente ¿Cuándo sacarán (o ya sacaron) la nueva remesa de discos?
Ya salió el nuevo lote son 300 discos calentitos con su respectivo cancionero. Además, cada canción viene acompañada de una ilustración. Para eso hemos contado con el apoyo de 10 artistas gráficos que trabajaron cada uno de los temas. El disco lo estamos vendiendo nosotros de manera directa y en la tienda Soma. Cualquier pedido nos escriben al facebook, o al correo : Lanuevainvasion@gmail.com
La banda ha optado por la autogestión de sus propios eventos. ¿Cuáles son los resultados de esas experiencias organizativas?
Positiva desde todo punto de vista, a pesar de los errores y la tensión que implica la organización. Porque son errores que no se volverán a cometer y los momentos de tensión son obstáculos que finalmente superamos como grupo y eso nos une más.
La autogestión genera capital humano y eso es lo más bacán, podemos decir que todos en el grupo sabemos cómo sacar adelante un concierto, como manejar la producción de un disco, como planificar una gira.
¿Qué tal la experiencia de participar en el programa Cultura Viva para la nueva Lima, en parques zonales?
Maldita, en primer lugar porque, como decíamos en los conciertos, iniciativas como esa nos permite llegar a público a los que no llegamos normalmente. Es democratizar el arte y tanto para el público como para nosotros. De hecho se construye más democracia así que enrejando un parque o haciendo un bypass.
Y en segundo lugar porque vemos en los organizadores, en los encargados de cada parque, una generación de gestores culturales que quizás no hayamos tenido antes, gente que tiene por profesión y no sólo por vocación el desarrollo de los espacios culturales. Esa gente es tan importante como los artistas, son el puente. Creemos que esta experiencia genera nuevos proyectos que a futuro solo pueden ir mejorando.
¿Qué tal sienten que funciona el mensaje de crítica social que ofrece la banda en los contextos festivos en los que participan?
Hay dos sectores: el público que le gusta oír las cosas como son y el público que cuando escucha música no quiere oír cosas que le recuerden que vivimos en una sociedad más injusta que la ptm. Nosotros respetamos las posturas de ambos y hacemos música para ambos públicos. La nueva Invasión no sólo critica, sino cuenta historias de amor, de lucha, y también de vacilón. Hablamos de la sociedad en general y de nosotros como parte de ella.
Si bien se sabe que presentan su síntesis musical como «el sonido popular de La Nueva Invasión» ¿Sienten alguna continuidad con las bandas del Agustino como La Sonora del Amparo Prodigioso o Los Mojarras?
Si de hecho que sí, tenemos integrantes que han crecido muy influenciados por lo que fue y es la movida cultural y musical que se forjo en El Agustino. Y el resto vemos con respeto y admiración la propuesta que plantearon esos grupos. Son los pioneros de la efervescencia de esta nueva corriente musical que tiene como hilo conductor la música popular de nuestro país.
La historia es continua somos lo que fuimos y creo que ningún grupo podría decir que surge de cero, partimos desde el escalón que dejaron los grupos que estuvieron antes que nosotros.
¿Con qué propuestas musicales se sienten identificados? ¿De qué fuentes de la tradición les parece que se puede aprender?
Creemos que se puede aprender de todas las fuentes de la tradición, incluso, lo que no hay que hacer. La tradición musical es completa, es melodía y ritmo y también es todo lo que la acompaña, es su gente, sus costumbres, su entorno. Si escuchamos música criolla, por ejemplo, decimos que paja y nos los loqueamos con los compases con las escalas, con el trabajo de la voz, etc. Pero también decimos que pena que la música criolla haya quedado reducida a un sector de conocedores y que se sigan cantando las canciones de toda la vida. Lo mismo con la música andina, cuando la escuchamos nos preguntamos cómo desligarla de la nostalgia y asociarla con otras emociones, cuando escuchamos chicha nos preguntamos cómo liberarla de los males de amor y del desarraigo. Entonces al final usamos la tradición musical pero no como no como un manual sino como referente y herramienta que sirve para hacer algo con nombre e identidad propia y que suena a nosotros.
Musicalmente nos sentimos identificados con La chicha que consideramos el género autóctono de la Lima urbana, con el son y la guaracha, con la música andina, con la salsa, con el punk, con el rock´n roll, la cumbia, etc. Nos identificamos con toda la música que nos haga bailar, gritar, llorar o reír. Y para que eso suceda la música tiene que ser autentica, honesta.
Muchas gracias a La Nueva Invasión, les dejamos con un video de su presentación en la Plaza San Martín.